martes, 26 de octubre de 2010

Caminante no hay camino se hace camino al andar

Este poema de Machado sin duda es una verdad universal y a lo largo de los últimos 10 días en eso ha consistido nuestra estancia en Sydney, aunque más que en hacer camino en írnoslo abriendo...
Como hasta ahora ha habido momentos buenos y menos buenos pero todos enriquecedores.
La semana empezó con un par de entrevistas de trabajo, la primera fue en una agencia de catering. Los tres Alberto, Pepe (que ya es de la familia) y yo nos pusimos nuestras mejores galas (camisa, vaqueros y zapatillas; no os vayais a pensar), y nos dirigimos a la oficina de la agencia con la confianza añadida que supone luchar los tres en el mismo bando. Llegamos, cubrimos unos impresos con nuestros datos y..., le tocó el turno a Pepe. Allá ibamos... La entrevista duraría tres minutos, cuando lo vimos salir con tanta rapidez se nos cayó el alma a los pies; pero él nos tranquilizó: "Pienso que ha ido bien simplemente te preguntan sobre tu experiencia y algún dato personal"; esto en parte nos dio moral, pero por otra lo de los 3 minutos "cheiraba a chamusquina". Nuestras entrevistas fueron un calco de lo mismo, así que salimos de la agencia con una sensación extraña; una mezcla de optimismo e inquietud al mismo tiempo; porque aquí la mentalidad está clara, al contrario de como decía Van Gaal, NOSOTROS SIEMPRE POSITIFOS!!!
A los tres días recibimos respuesta... a pesar de ser candidatos muy competitivos, en esta ocasión había gente mejor que nosotros así que ... nanai, pero una entrevista más es una experiencia más que cargar en la mochila; aquí no hay mal que por bien no venga.
La segunda entrevista era con los padres de un niño al que querían que le enseñara español; en realidad el niño ya lo habla muy bien, pues estuvieron los últimos 4 años viviendo en España y hace tan sólo dos meses que regresaron a Sydney. Pero su intención es que continuara mejorándolo y practicándolo.
Con los padres, tengo que decir que genial, es el típico matrimonio entusiasta y muy activo, salen todos los días a nadar y a pasear. Ella es pintora (de nivel porque hace exposiciones en museos), él es auxiliar de vuelo y en sus ratos libres se dedica al deporte y la escultura, son gente culta, moderna que buscaban a alguien que continuase formando a su hijo en la lengua española (no quiero comentarios jocosos al respecto jaja) y que además jugase con él.
Como os digo; en la entrevista, bueno en el café que nos tomamos, la conversación fue de lo más natural y cercana, hablamos en español, ambos tienen buen nivel, y llegamos a la conclusión de que empezaríamos los martes y los sábados  con un par de horitas a razón de 20 dolares la hora (que no está mal). Además como os cuento ellos se ofrecieron a ayudarme en todo lo que necesitase en estos primeros meses de adaptación. Así que salí muy contento y con nuevos alidados que nos acompañaran en nuestra cruzada.
Ya estabamos a viernes y por fin tocó un poquito de playita, porque no sé si fuimos nosotros que lo arrastramos desde Galicia, pero aquí sigue lloviendo todos los días, la gente reza por las calles clamando por la llegada del verano y nosotros los acompañamos en el sentimiento. Pero vaya que el viernes toco playita.
Nos fuimos los tres con nuestro balón bajo el brazo, el tiempo no acompañaba mucho pero era lo de menos, IBAMOS A DAR UNOS TOQUES!!! y eso era lo que contaba.
Empezamos a demostrar nuestra calidad a los australianos que andaban por los alrededores cuando se nos acercó una sueca y nos pregunta si ella y sus dos amigas nos pueden echar un partido, nosotros aceptamos de buena gana y les comentamos de mezclar los equipos pero dijeron que no. La verdad es que las subestimamos porque aún se manejaban, sobre todo una que por un par de veces casi me destroza a balonazos y a Alberto le metió un viaje que lo levantó en el aire, nos quedamos a cuadros!!! ajaja. No sabíamos si era el gen nórdico pero joer, como metían el cuerpo, se tiraban al suelo... Vamos que estuvo entretenida la cosa. Y tras el encuentro nos llevamos sus teléfonos y un par de moratones cada uno!
Esa noche fue nuestra primera noche realmente de relax, estuvimos tomando cervecillas con nuestros coleguillas italianos en el hostel: Mikele; uno de los que curra en el hostel, siempre de coña, lleva el pelo a lo afro, por eso le apodamos "Simoncheli"; Mario es el típico "cachiman" que estuvo en el ejército, le encantan los coches, las motos, el fútbol y Arnold Schwarzenegger pero que en el fondo es un pedazo de pan y luego está Bruno, el polifacético; el tio hace de todo, curra de chef, camarero, está buscando de mecánico... Estos tres personajes ponen el acento italianini a nuestra aventura.
La verdad es que fue una buena noche, de esas de tranqui en las que hablas de todo y con todo el mundo, mientras disfrutas de unas cervecitas bien fresquitas, ya sabéis...
El Sábado repetí en el restaurante español, y la verdad es que por momentos el curro de camarero es stressante, entre el idioma, el volumen de gente y que aún me estoy haciendo con el oficio y con el lugar de trabajo... Pero lo veo como una prueba más, de las más exigentes. Pero de esas en las que al final del día, cuando terminas el turno, sientes esa sensación de satisfacción que te invade después de una victoria; así que habrá que continuar ganando partidos hasta que un día las victorias se conviertan en mera rutina.
Estoy deseando que Albert y Pepe empiecen a currar para compartir experiencia e inquietudes, seguramente empiecen esta semanita; Pepe tiene un par de pruebas y Alberto está pendiente de un turco y un japonés así que seguro que al final de esta semana ya estamos los tres empleados como dios manda jejeeje.

Un inciso, que me acaba de venir a la mente y me apetece contarlo, el martes pasado como buenos españoles amantes del fútbol, Alberto y yo nos levantamos a las 5 de la mañana para ir a ver el partido del Madrid contra el Milán. Desayunando viendo un partido de champions, eso sólo podía pasar en Sydney! También estamos intentando seguir al Depor, pero se ve que por estos lares no se le da mucho bombo al equipo coruñés - Tranqui Albert, seguiremos intentándolo -.
Por fin estamos a lunes, llegó el momento de dejar el hostel y mudarnos a nuestro pisazo!!JAJA. Al final, acogemos al Pepe, esta semana en nuestra habitación, hasta que se mude a su casa de la playa (vive mal el tío). El traslado fue todo una odisea, tenemos que colgar las fotos. Pero sólo imaginaros a tres pringadillos, con dos mochilas y dos maletas cada uno, cruzando todo el centro de Sydney, la gente se "partía" al vernos pasar, es que vaya estampa; una cosa es ir de mochileros y otra llevarse la casa a cuestas, que parecíamos botones de un hotel, pero todo sea por ahorrarnos la pasta de los taxis que para variar son carísimos.
Lo mejor fue cuando llegamos al piso y nos pusimos a montar unas literas, con Michael, nuestro flatmate chino eso si que era para grabar: 3 españoles discutiendo en inglés con un chino sobre la mejor manera de montar una litera del IKEA, tiene ... el asunto. Pero bueno ya estábamos en el que será nuestro hogar, al menos, los próximos 3 meses.
Y llegamos al martes, sin duda el día más stressante y ajetreado desde que llegué a Sydney. Nos levantamos a las 7 de la mañana para ir a clase. Acabamos a las 14:30 y me fui directo a la playa de Bondi, donde había quedado con Rox, la madre y con Billy, el niño al que tengo que enseñar español. La primera toma de contacto fue bastante buena. Billy de 9 años, tiene un nivel de castellano prácticamente equiparable al de cualquier niño español de esa edad, aunque si se nota que es biligüe por ciertas expresiones que emplea al hablar y está claro que al estar el resto del día hablando en inglés también se le hace complicado cambiar el chip. Pero hay buenas perspectivas. El primer día lo que hicimos fue conocernos un poco y jugar al fútbol, al frysby, a los bolos (improvisados), al rugby... vamos que no fue relajadita la sesión y eso que yo había preparado diferentes tareas para hacer antes de bajar a jugar pero se ve que la madre prefería juegos al aire libre para empezar, pues que así sea y nos pusimos a ello... A ver que tal va saliendo.
Tan pronto acabé con el niño, salí escopeteado para el bus, llegué a casa me cambie en 30 seg. y corriendo para el restaurante (si mamá siempre con prisa, pero esta vez no tenía elección).
Era mi primer día en la planta de abajo del restaurante y fue de locos. Nunca subestimeis a los camareros y más si son extranjeros, porque entre entender a los clientes, a los cocineros chinos con su inglés particular, el volumen de gente que había y que aún no tengo la habilidad manejando platos y bandejas que tiene el resto... pues os podeis hacer una idea. Además cuando andamos a mil, la gente no se puede parar a explicarte y algunos ya ni lo intentan así que no te queda otra que aprender o aprender.
Aunque tengo que dar las gracias a Antonio, un camarero portugués que lleva 40 años en Sydney trabajando en el mismo restaurante. 40 años!!!!, sólo de pensarlo se me ponen los pelos de punta, hablando con él me di cuenta que lo único que tiene es su trabajo... que complicada es la vida a veces. Pero el caso es que cada uno tendemos a preocuparnos de lo nuestro; y en este caso Antonio ejerció de maestro y yo traté de empaparme al máximo de todos sus conocimientos que es lo que más me urge ahora mismo para poder ir más tranquilo y confiado a currar y así también disfrutarlo en la medida de lo posible.
Pero esto no para,  hoy en cuanto acabe esta entrada me visto y  a por mi siguiente jornada de trabajo, a ver que tal sale que ayer llegué destrozado; aunque al menos cené paellita que eso siempre motiva jaja.
Seguro que en entradas venideras los tres estaremos ganandonos el pan, más seguros de nosotros mismos y planificando nuevos proyectos en los que aventurarnos.
Me despido con unguiño a mi hermana Araceli, con una frase que marcó nuestra adolescencia: "La vida es dura, cómprate un casco!!!"
Besos y abrazos para tod@s.

7 comentarios:

  1. Cari...estás feito un pai de familia!!xa vexo que non deixades de pelexar cada día...cmo debe ser!!desde aquí mándovos moita forciñaaa!!sabes que che quero moitísimo e que estou orjullosa de ti meu rei.un bicaso enormee e outro tmén pa alberto e máis pa pepe(xa q dis q é da familia..xdd)!

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  2. suerte tío, y no me preocupo por ti ya que tu siempre tuviste un buen casco
    Un abrazo y a seguir ahí en la cresta!

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  3. Vale Q!!! María,los niños y yo, estamos muy orgullosos de vosotros. Os mandamos amoriño y salud.

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  4. Jose Luis y Dora: Hola a los dos, solo queremos deciros que estamos orgullosísimos de vosotros y de lo valientes que habéis sido para buscaros la vida. Os enviamos un montón de abrazos y mucha fuerza para seguir adelante, que seguro que conseguiréis todo lo que os propongáis. Muchísimos besos a los dos. Y que sepáis que aquí estamos para lo que necesitéis.

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  5. 19 HORAS 10 MINUTOS,LUCAS LADRANDO, CARALINDA DEITADA NO SOFÁ,CUA POLÍGLOTA, NA CAIXA APARVADA... NAVY,EU O TECLADO........, VOS A CEN, SIN CASI TEMPO PARA CAVILAR, É O QUE TEN A VIDA DO EMIGRANTE, E ESO QUE NON TEN NADA QUE VER CUA DOS ANOS CINCUENTA DO SÉCULO PASADO....JAJAJA
    TEDES QUE ESTAR LEDOS CO QUE ESTADES FACENDO, NON SEI SI TEDES TEMPO A DECATARVOS........DENDE AQUI, TODOS NOS XACTAMOS DAS VOSAS AVENTURAS, AGORA TODO POS PARECE COMPLEXO, TRANQUI DENTRO DE 20 OU 30 ANOS TODO CONTROLADO....JEJE, XA VEREDES COMO ESO CHEGA MOITO ANTES DO QUE ESPERADES NESTE INTRE..... VOS QUEREMOS, FORCIÑA E CENTOS DE BICOS PARA QUE OS ESPALLEDES........

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  6. ¡Visoco!Bajo mi CASCO (el tuyo) os envío toda la energía del mundo para seguir haciendo camino, sin dejar de andar..NUNCA!Biquiños a moreas para os 3!ÁNIMOOOOOO!

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  7. Como vexo, esto vai de que se pronuncie a familia, tócame!
    Dei; eu sigo botando euriños na hucha, penso que de aquí a dez anos poderei ir a Sidney, á volta invitas ti! :-)
    Alberto; senon podes ver o Depor....casi mellor...un vive máis feliz na ignorancia!;-)
    Un bico grandeee

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